Vivir quieto podría ser una enfermedad
La inactividad afecta no sólo la salud de muchos obesos, sino la de personas con un peso normal.
Ante la evidencia de que el sedentarismo es una causa de sobrepeso, obesidad y otros factores precursores de males como los cardiovasculares, la diabetes, la hipertensión y el deterioro articular, el prestigioso fisiólogo Michael Joyner, de la Clínica Mayo (Estados Unidos), acaba de proponer que el sedentarismo sea declarado una enfermedad.
En un artículo de su autoría, divulgado por The Journal of Physiology, Joyner asegura que la inactividad afecta no sólo la salud de muchos obesos, también la de personas con un peso normal, como aquellas cuya jornada laboral transcurre frente a un escritorio, los pacientes inmovilizados durante largas convalecencias y las mujeres que deben permanecer en reposo por problemas durante su embarazo, entre otros.
El fisiólogo explica que la falta prolongada de ejercicio hace que el cuerpo no esté en buena forma, lo cual se suma a numerosos cambios metabólicos y estructurales, que hacen que los huesos y los músculos se atrofien y disminuya la resistencia física y el volumen sanguíneo. Esa es la razón por la cual la frecuencia cardiaca puede aumentar excesivamente cuando los sedentarios hacen alguna actividad física. Quienes no están en forma, además, suelen cansarse más rápido o sufrir mareos ante cualquier ejercicio.
"Podría decir que la inactividad es la raíz de muchos de los problemas habituales que tenemos", explica Joyner. "Si la medicalizáramos, podríamos empezar una vía de acción, justo como ha ocurrido con las adicciones y el tabaquismo, para dar a las personas tratamientos enfocados en enseñarles a cambiar sus estilos de vida", sostiene.
Eso incluye, por ejemplo, que se adopten recomendaciones como la de la Organización Mundial de la Salud, que aconseja la práctica de por lo menos 150 minutos de ejercicio aeróbico a la semana (divididos en sesiones de 30 minutos) e incorporar hábitos que mejoren la actividad física. Entre ellos se cuentan usar las escaleras en lugar del ascensor y no moverse en carro sino a pie, en desplazamientos cortos.
Fuente: elmundo.es
22/09/2012